La industria farmacéutica peruana es la segunda rama industrial con los indicadores de innovación más elevados (82.1%). Se estima que entre el 2010 – 2012 (balance más reciente), las inversiones destinadas a este aspecto ascendieron a S/.176 millones y se concentraron en compra de bienes de capital (58.2%), I&D local (24.0%) y estudios de mercado para introducción de innovaciones (11.1%).
Lo afirmó José Enrique Silva Pellegrin, presidente de la Asociación de Industrias Farmacéuticas Nacionales (ADIFAN) al conmemorar el 31 aniversario del gremio y entregar el “Premio ADIFAN a la innovación en Ciencias y Tecnología Farmacéuticas” a científicos investigadores destacados del ramo.
El presidente de ADIFAN informó que el 54.8% de los trabajadores de la industria farmacéutica cuenta con educación superior y 11.8% labora en áreas de innovación. Destacó que actualmente hay 48 industrias farmacéuticas con más de 50 trabajadores.
Alta productividad local
Por otro lado, dijo el ingeniero Silva, la productividad del trabajo de la industria farmacéutica es elevada. “Un trabajador de la industria farmacéutica generará siete veces más de lo que produce uno de hoteles y restaurantes o cuatro veces lo que aporta un trabajador textil.
La productividad media del capital se estima que es 156.4% mayor que la industria de bebidas, 87.2% más que la industria textil, 32.2% mayor que la construcción, y 41% más que hoteles y restaurantes.”
Incluso, según explicó, “un incremento de 10% de la producción generará 4.3% más de remuneraciones en la economía. “
Cabe destacar que el costo de la generación de cada nuevo puesto de trabajo en la industria farmacéutica se estima en S/. 44 mil nuevos soles.
El sector genera la mayor cantidad de puestos de trabajo altamente calificados, unos 13 mil directos y casi 150 mil indirectos.
Larga cadena
Por otra parte, el grado de integración de la industria farmacéutica (44.4%) es uno de los más altos del sector manufacturero, superando el promedio industrial (33.0%) y algunas ramas tradicionalmente generadoras de valor agregado como prendas de vestir (32.1%) y textiles (26.7%), supera también a la construcción (42.2%), hoteles y restaurantes (41.3%).
Entorno para la inversión
Aunque el entorno macroeconómico peruano es favorable a la inversión, hay pocas empresas industriales farmacéuticas incorporadas al sector en los últimos años. Así, el lento desarrollo industrial del Perú exige continuar impulsando la innovación y la productividad en sectores como el de los medicamentos, cuyo mercado, en el país, bordea los US$1900 millones de dólares, mientras que el internacional superará este año el billón de dólares (millón de millones).
Se observa recuperación de la producción desde el 2005, creciendo a tasas promedio anuales de 9%, pero aún la capacidad instalada utilizada es baja al cierre de 2012 (35.7%).
Actualmente, la producción de la industria de productos farmacéuticos asciende a US$ 1046 millones y por encadenamientos de producción genera en otros sectores US$ 638 millones adicionales. La contribución de impuestos es de US$ 125 millones; mientras la producción de este sector se concentra en las empresas grandes (73.5%) y medianas (18.2%).
“Ya que la economía peruana pasa por un período favorable, los laboratorios extranjeros, que una vez tuvieron planta en nuestro país, pueden regresar a fabricar en suelo peruano, tal como lo hacen los nacionales”, dijo José Enrique Silva.
“El potencial de la industria farmacéutica peruana, (valor agregado/ remuneraciones) es inmenso, y a nuestra megadiversidad, se suma una elevada competitividad; se tiene que se encuentra entre las primeras 21 del mundo en el ratio aludido, demostrando alta productividad y competitividad; razones suficientes para atraer inversión latinoamericana de empresas de países que vienen afrontando crisis, cuando el Perú es un país de grandes oportunidades” concluyó Silva.